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¿QUÉ SIGNIFICA QUE LA HUMANIDAD VA A DESPERTAR?
Despertar supone que los seres humanos nos hacemos conscientes de las cualidades que ahora permanecen dormidas en nuestro interior. Ellas son las que constituyen nuestra esencia divina: bondad, compasión, capacidad de acogida, sentimiento de unidad con los demás, valor, ternura, alegría, inteligencia, sabiduría, amor… y otras más que ahora desconocemos.
Esas cualidades las hemos desarrollado al vivir multitud de experiencias a lo largo de nuestro proceso evolutivo, pues únicamente cuando vivimos una experiencia extraemos de ella las cualidades que encierra.
Un ejemplo: si una persona nunca ha pasado por una enfermedad dolorosa y difícil, por más que hable con otras personas que la padezcan, o por muchos libros que lea sobre esa dolencia, hasta que ella no viva una situación igual o similar, no podrá comprender el sufrimiento y la desesperanza que esa enfermedad ocasiona.
Igual en todas las demás situaciones que la vida pueda presentarnos: vivir en la pobreza o en la riqueza; haber perdido o no a un ser querido; nacer de unos padres que nos colmaron de cariño o que por el contrario nos privaron de él… Solo la experiencia directa desarrolla nuestras cualidades, y todas ellas en conjunto constituyen nuestra esencia divina.
¿CUÁNDO VA A DARSE ESE DESPERTAR?
En el artículo anterior recordaba una frase de Albert Einstein: “Los problemas no se pueden solucionar en el mismo nivel de conciencia en el que fueron creados”. Traducida a un lenguaje práctico esta frase dice que para poder solucionar las dificultades que ahora nos afectan (cambio climático, nulo respeto a los derechos humanos básicos en muchos países, terrorismo, migración masiva…), la humanidad, o al menos una parte significativa de ella, ha de dar un salto de conciencia.
Y esto es justamente lo que supone el despertar del que estamos hablando: los seres humanos, al hacernos conscientes de las cualidades que hemos desarrollado a lo largo de nuestro proceso evolutivo, alcanzamos un mayor grado de conciencia. En ese momento ya estamos en condiciones de trabajar con eficacia para crear un nuevo y mejor modo de convivencia, una nueva sociedad. Este despertar de la humanidad va a darse en un momento cercano en el tiempo.
¿HAY ARGUMENTOS QUE APOYEN ESTA AFIRMACIÓN?
Sí los hay, aunque no son argumentos de tipo lógico como cuando se explica que dos por dos son igual a cuatro. Para mí encierra una gran dificultad expresar con palabras aquellas pruebas que están más allá de la razón. En los planos superiores en los que nos vamos a encontrar tras nuestro despertar, la verdad se manifiesta sin necesidad de que sea razonada: se percibe, se sabe, se siente, es. No obstante, veamos algunos razonamientos que apoyan la afirmación de que el despertar humano está cerca.
1º ACTITUD AL ESCUCHAR
Desde nuestros orígenes, cuando alguien investido de autoridad hablaba a un grupo de personas, estas le escuchaban en actitud de aceptación. Pensaban: “Él sabe, y yo no sé. Lo que él dice es verdad”. Así fue durante siglos, y ese modo de escuchar al rico, al poderoso, al sacerdote, al que tenía poder u ostentaba un cargo público, al dueño de las tierras, etc., ha creado en nosotros una actitud pasiva ante lo que se nos dice. Esa manera de escuchar está grabada en nuestros genes.
Ahora es un momento diferente: estamos preparados para escuchar lo que oímos confiando en que en nuestro interior está la sabiduría que nos va a permitir discernir la verdad de la no verdad. Esta confianza ya la tenemos, pero solo se desarrolla si se pone en práctica. Tenemos que llegar a sentir que no necesitamos que nos lo den todo razonado, sino que somos capaces de asumir una idea que nos resuena, integrarla y manejarnos con ella con criterio propio.
Este es un argumento esencial, porque si necesitamos que se nos razonen las cosas, que se nos den mascadas, nos anclamos en el mismo nivel de conciencia en el que estamos. Por eso la tarea de mostrar que ahora va a darse un despertar en los seres humanos es en parte mía y en parte vuestra. Solo con razonamientos de nuestro nivel de conciencia actual no podemos vislumbrar el despertar, porque el despertar es justamente la puerta de acceso a un nivel de conciencia superior.
2º LOS NUEVOS MEDIOS DE COMUNICACIÓN
Nuestro proceso evolutivo dura ya miles de años, y justamente ahora, en apenas unos pocos años, surgen la televisión, internet, móviles, WhatsApp, redes sociales como Facebook, Twitter, etc. Algunos de ellos se están utilizando de manera masiva desde hace solo 4 o 5 años. La aparición ahora de estos medios, y su rápida y enorme difusión, nos trae un mensaje de la Vida:
“Con estas nuevas tecnologías de comunicación os muestro que sois una unidad, que lo que ocurre en un lugar de la Tierra igualmente sucede en otros. Que vuestras acciones afectan al planeta y a los demás seres que en él viven, ya se trate de la decisión del gobernante de un país o de los vertidos que contaminan la tierra, el agua, la atmósfera…»
«Igualmente influyen en los demás vuestros actos de generosidad, apoyar al débil, no juzgar a los demás, orar pidiendo ayuda para el que vive una situación difícil, las acciones solidarias cuando hay una catástrofe… Esas energías llegan rápidamente a cualquier lugar de la tierra, por alejado que se encuentre de vosotros. Ahora conocéis que hay recursos suficientes para todos y que sois una gran familia: unidos, avanzáis; separados, creáis caos y dolor”.
Esta información no se tenía en la anterior generación, ni siquiera hace unos pocos años. La Vida nos anuncia, si leemos su mensaje con el corazón, el próximo despertar de nuestras cualidades internas, pues solo ese despertar posibilita que avancemos unidos.
3º LA TIERRA ESTÁ EXPERIMENTANDO UN SALTO DE CONCIENCIA
A nivel físico todos comprendemos que en una zona de poca lluvia solo pueden prosperar una serie de plantas y animales, diferentes de los que lo hacen en una zona lluviosa. Igual sucede con nuestro crecimiento interno. El entorno que nos rodea y en el cual somos capaces de crecer internamente ha de ser un reflejo de lo que somos dentro.
Un ejemplo: con nuestro nivel de conciencia actual no podríamos crecer en un lugar habitado por Maestros y Seres realizados que tienen un alto nivel de conciencia ya activado. No les entenderíamos; nuestras acciones, palabras y pensamientos —tan diferentes de los suyos— nos harían creer que somos malas personas; sentiríamos deseos que nos avergonzarían…
La Tierra es el lugar idóneo para desarrollarnos internamente: en mayor o menor medida nos identificamos con los demás, o al menos con aspectos de los demás; se producen inundaciones, sequias, hay lugares de exuberancia vegetal y lugares desérticos… y así vemos en el exterior la misma variedad que apreciamos en nuestro interior. Hay selvas en las que unos animales luchan con otros, y de algún modo también los seres humanos luchamos entre nosotros…
Estamos sincronizados con la Tierra. Es difícil de explicar, aunque fácil de entender… El entorno exterior posibilita y apoya que se muevan en nosotros impulsos, emociones, anhelos y metas adecuadas a nuestro crecimiento.
Al dar ahora la Tierra un salto de conciencia y entrar en un mayor nivel de armonía (que no quiere decir de menor diversidad) se convierte en el lugar perfecto para proseguir nuestro proceso evolutivo tras el salto de conciencia que vamos a experimentar los seres humanos. Si no lo diésemos al tiempo que lo da ella, no podríamos permanecer en el planeta.
4º MUCHOS CREEMOS QUE HAY VIDA DESPUÉS DE LA MUERTE AUNQUE NO TENEMOS NINGUNA PRUEBA DE ELLO
Creemos que hay vida después de la muerte y ni siquiera han venido nuestros seres queridos que ya se marcharon a confirmarnos que tras la muerte del cuerpo físico la vida continúa. ¿Por qué sentimos que sí la hay? Porque esa creencia de que hay vida tras la muerte está grabada en nuestro interior y nos resuena. Igual en el caso del despertar humano. Si nos interiorizamos y preguntamos a nuestro Ser si va a darse el despertar en un plazo de tiempo cercano, ese Maestro interno que todos tenemos nos hablará.
Entonces sentiremos como brota una especie de intuición, sin razones, llena de luz y de verdad, poderosa al tiempo que dulce, suave sin querer imponerse, solo mostrarse, y que nos responde que sí, que pronto va a ocurrir ese acontecimiento hermoso y extraordinario.
5º SOMOS MUCHO MÁS…
Seguro que todos hemos sentido, en momentos de interiorización y de paz, que somos mucho más de lo que ahora nos vemos capaces de manifestar. En esos momentos vislumbramos, aunque fugazmente, que poseemos algo maravilloso, un enorme potencial presto a despertar que nos va a permitir sentirnos plenos, felices y llenos de amor. Ese sentimiento tiene mayor fuerza que cualquier razonamiento mental.
Si realmente creemos que tenemos naturaleza divina, no busquemos la Verdad fuera de nosotros, ni en este artículo, ni en un buen libro, ni siquiera en los que llaman «Libros Sagrados». Entremos en nuestro interior: ahí mora el Ser. Preguntémosle.
Gracias Juanjo, por compartir tu gran sabiduría, en estos momentos de tanta crispación ver una luz al final del tunel, ayuda a no desesperar.
Angeles, gracias por tu comentario. Efectivamente son tiempos difíciles, de tribulación y prueba, aunque «en un momento cercano en el tiempo», va a producirse la buena nueva del despertar de la humanidad. Tenemos que perseverar en nuestro esfuerzo y esperar ese bendito momento.
Recordemos que todos contamos con una ayuda extraordinaria: El Ser supremo, puro amor, habita en cada uno de nosotros. Un abrazo. JUANJO