CategoriaAutoayuda

HONESTIDAD Y AMOR A UNO MISMO

Los seres humanos disponemos de todas las cualidades necesarias para afrontar cualquier acontecimiento que la vida nos presenta. En nuestro interior está la fuente de la que brotan de modo natural paz, seguridad, confianza, armonía, esperanza, fuerza interior… Es sólo ahí, en nuestro interior, donde se encuentran estas bellas y útiles cualidades. En ningún otro lugar podemos encontrarlas, ni tampoco hay nadie que nos las pueda proporcionar.

Del mismo modo que de una fuente fluye el agua, de nuestro interior surgen cada una de las cualidades que nos ayudan a dar la mejor respuesta a las situaciones que vivimos. La diferencia es que la fuente de agua ha de ser alimentada con esa misma agua para que no cese de manar, en tanto que nuestra fuente interna se nutre de nuestra autenticidad, honestidad e integridad.

Cuando somos íntegros, auténticos y honestos empiezan a suceder milagros en nuestra vida. El primero de todos, y el más importante, es que nos convertimos en nuestro mejor amigo. Sentimos que nos respetamos y amamos, y que nos gusta estar en nuestra propia compañía. Pero esto sólo es posible en la honestidad. No podemos confiar en una persona deshonesta, y menos aún si esa persona somos nosotros mismos. Leer mas

DECIR NO

A menudo nos cuesta decir no. Todos necesitamos afecto, respeto, aceptación y Amor, y creemos que diciendo sí, aunque por dentro queramos decir no, la otra persona nos va a proporcionar eso que precisamos. No es así. No podemos llamar afecto o Amor a algo que se nos da de una manera interesada. Todos sabemos que el auténtico Amor es sin condiciones. Lo que se nos entrega interesadamente es un sucedáneo, algo que no puede llevar el nombre de Amor.

Aunque en nuestra vida digamos mil veces sí para contentar a otros, si con cada uno de estos síes nosotros nos sentimos mal, el Amor no nos llegará, porque en verdad el único Amor que nos llena totalmente es el que cada uno sentimos hacia nosotros mismos. Leer mas

SER LIBRES: PERDONAR Y PERDONARNOS

El primer paso para sentirnos libres y felices es perdonarnos por aquello que sentimos que no hicimos bien, al tiempo que perdonamos también a los que nos han ocasionado algún tipo de sufrimiento.

Antes del perdón estamos presos en una celda cuyos barrotes son el resentimiento, la amargura, la culpa, la vergüenza, la infelicidad. La llave que abre la puerta de esa celda es el perdón. No hay otra forma de abrir la celda. Para ser libres y felices tenemos que usar la llave del perdón. De este modo salimos a la Vida, a respirar aire puro, a sentir los rayos del sol, a decir gracias, a decir te amo.

La persona que ha sufrido profundamente por lo que otros le hicieron y es capaz de perdonar, es un ser con un bello y puro corazón. Se siente libre y feliz, y esa felicidad la transmite a los seres de su entorno. Cuando llegue el momento de marcharse, podrá mirar atrás y decirse: nada dejo pendiente, me voy en calma, en paz, feliz. Leer mas